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martes, 9 de septiembre de 2008

LA BESTIA DE GEVAUDAN





La bestia de Gevaudan, ¿leyenda o ser mostruoso? ¿mitología o un simple animal salvaje? Mucho se ha escrito sobre ello, incluso ha servido de idea para desarrollar películas, pero no queda lo suficientemente claro si este animal llegó o no a existir, un animal misterioso que aterrorizó a la población francesa y se convirtió en una de las leyendas más vivas de la cultura gala.
La Bestia de Gevaudan fue, según la leyenda, una criatura terrestre que atacaba a seres humanos en la región de Gevaudan, en el centro de Francia, entre los años 1764 y 1767.Entre estos años, más de 120 personas, mujeres y niños, casi en exclusiva, fueron horriblemente asesinados por un animal misterioso. Todo esto ocurrió en la región montañosa del Gevaudan, en el centro de Francia, y nadie logró resolver el enigma a pesar de las insistentes batidas y de las inmensas recompensas que ofrecía el Rey. Con ello, la bestia pasó a formar parte de la mitología del país, al igual que el monstruo de Lago Ness para los escoceses.
Lo cierto es que el animal aterrorizó a la población de Aveyron en el siglo XVIII, convirtiéndose rápidamente en un asunto de Estado, por ello una gran cantidad de cazadores de toda Francia acudieron a la región atraídos por la generosa recompensa que se ofrecía por su piel. Todos ellos trataron de cazar a lo que se intuía podía ser un enorme lobo de un poder devastador inimaginable.
El primer ataque de la bestia se produjo el 30 de Junio de 1764 y su primera víctima una niña de 14 años, Jeanne Boulet, ese mismo verano se cobró más vidas y asesino 2 niñas más, 2 niños y una mujer de 32 años. En invierno el número de víctimas se incrementaba alarmantemente incluso asesinando dos veces por semana.
En sus ataques la bestia solía actuar de la misma forma siempre, arrancaba de un solo bocado la cabeza de las víctimas, un claro indicio de su tamaño y su fuerza. En tan solo un año se había cobrado 54 víctimas. El monarca alarmado por tan abrumantes cifras decidió enviar a sus tropas de choque, los conocidos como "dragones", que formaban la élite del ejército real. Envió 4 tropas de caballería con el fin de realizar una batida que acabara de una vez con la bestia. Según se dice, el jefe de una de las tropas quedó sorprendido al ver a la bestia, según su descripción era casi tan grande como su caballo pero infinitamente más rápida y ágil, tras tratar de abatirla a disparos sintió que las balas no eran capaces de traspasar su piel. Otras descripciones le señalaban como un enorme lobo de aspecto muy extraño, con el lomo rayado y una línea negra que le recorría desde el cuello hasta la cola, el color de su cuerpo era rojizo, con el morro afilado, una cola muy larga y fuerte y extraordinariamente móvil y con unas fauces desmesuradas. Los esfuerzos de los "dragones" eran en vano, no solo se debían enfrentar al difícil duelo de encontrar a la bestia además tenían otros duros competidores, los caza recompensas, que atraídos por el precio que se puso por dar fin a la vida de la bestia les tendían emboscadas y les confundían con pistas falsas.Por más lobos que abatían las víctimas no cesaban. Sin duda alguna el comportamiento de la bestia no se asemejaba al de un lobo común pues expertos cazadores de toda Europa trataban de eliminarla con las técnicas que se empleaban para la caza de estos.La gente empezaba a sentirse muy asustada, ni la participación del Rey había conseguido aplacar a la bestia. Los clérigos aprovecharon para hacer su campaña diciendo que la bestia sólo atacaba a las jóvenes más lascivas, los nobles acusaban a los gitanos pues decían que alguna de las bestias de su circo debía haber escapado. También se apuntó a un terrateniente que había recorrido África con una compañía comercial, criaba mastines asilvestrados, lobos, leones y tigres. El pueblo llegó a pensar que había cruzado a estos animales hasta dar con la bestia.
Finalmente la bestia fue muerta y la leyenda cuenta que fue abatida con una bala de plata hecha tras fundir una medalla de la virgen. El monstruo fue llevado ante el Rey, más tarde fue embalsamado y años después sus restos desaparecieron. Era algo parecido a un lobo gigantesco de fauces enormes.Había varias teorías sobre la existencia de esta critura, unos hablaban de un animal no clasificado por la ciencia, otros de una especie de cánido prodedente del lobo alpino, la que parece más adecuada, se llegó a hablar incluso de una criatura venida desde el infierno, pero ninguna de estas teorías quedó demostrada y la leyenda de la Bestia de Gevaudan quedó para la posteridad, sirviendo de fundamento a historias y quedando plasmada en el cine en la película "El Pacto de los Lobos", y en numerosos escritos mitológicos.

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